A las 8:45 horas, me las prometía muy feliz, pues pensaba en una etapa corta y la de mañana larga, realmente a medio camino fue cuando viendo la etapa en el camino en un panel, era al revés debería de estar llegando y sin embargo, quedaban 20 km, eso sí se veía el pueblo allá a lo lejos y qué largo se me ha hecho.
La etapa de hoy ha sido bastante monótona, ya que ha sido por la calzada romana y entre olivos y viñedos, así prácticamente los 30 km.
Sin embargo, hay muchos peregrinos hacia Santiago, me he cruzado con más de 25, pero también es verdad, que muchos tienen como meta Zamora o Salamanca, sobre todo los españoles, mi meta sigue siendo El Rocío.
Con todos los que me cruzo se extrañan de que vaya al Rocío, algunos ni saben donde está sobre todos los extranjeros, pero en ese rato aprenden un poco de la geografía española.
Sin mayor problema, he salido de Torremejía por la calzada romana, que parte desde la esquina del muro del campo de futbol. También se puede coger otro camino un poco más arriba, ya que luego se encuentran.
Siempre se debe preguntar cual tomar, según la época en la que estemos podremos tomar, uno, otro, o ambos.
Hoy la Carreta de Radiolé me ha dejado tirado y he tenido que ir andando, mañana madrugaré un poco más.
Tomo el camino ancho de tierra y sin dejarlo hasta que se junta con un terreno cultivado pero queda una senda por donde pasar y llegar al paso existente bajo el ferrocarril. Un poco antes de pasar hay una balsa de agua, si llueve mucho aumenta de nivel y puede llegar el agua por encima del nivel de paso. Este es el punto conflictivo, por eso hay que asegurarse qué camino tomar.
Seguimos por el camino hasta que llegamos a una bifurcación , la de la izquierda es un camino de la misma anchura del que traemos y me lleva a un cortijo, la de la derecha aumenta de anchura para retomar la calzada romana, ya no la tenemos que dejar hasta unos diez kilómetros antes de Villafranca. De todas formas, ambos se unen siguiendo el lateral del cortijo.
En este punto se bifurca en dos, que hacen una forma de U, el de la izquierda lleva hasta el recinto ferial del pueblo, el de la derecha, lleva hasta la carretera nacional N-630.
Tomo la decisión de esta manera porque me ha pillado el toro, el sol calienta a rabiar y del suelo el calor empieza a subir hacia arriba, no me esperaba estos kilómetros a la salida y estaba quedándome sin agua, que hoy le había echado el zumo de dos limones. He comido un tentenpié y eso me ha salvado.
Siempre por carretera cuando se siente una necesidad puedes echar mano de más medios.
Así que llego a la carretera y comienzo a andar por el arcén y veo la señal de la flecha verde hacia el Rocío. Un poco más adelante, ya tomo el camino paralelo a la carretera, que no la dejaré hasta llegar a Villafranca.
Llego al albergue El Carmen y me atiende María José, muy agradable y simpática. El albergue está muy bien y merece la pena venir aquí si se puede.
La etapa de hoy ha sido de unos 30 km y la he realizado en ocho horas y media.
La etapa de mañana será más corta de Villafranca de los Barros a Zafra.
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